Por: Juan Carlos De la Cruz – Cusco, Perú /Correo: jcalacruz09@gmail.com
El pensamiento crítico tiene su origen en la palabra latina “criticum pensare”, que significa “considerar” o “juzgar”. El concepto de pensamiento crítico engloba un conjunto de aptitudes y disposiciones intelectuales que ayudan a pensar con claridad, precisión, fuerza y responsabilidad.
Es considerado como un proceso o un método para examinar creencias y afirmaciones, implica un esfuerzo por examinar la información que actualmente se acepta como factual, para luego analizarla en el contexto de otra información que puede o no contradecir o estar de acuerdo con los hechos aceptados. El pensamiento crítico trata de utilizar la lógica, las pruebas y la razón para evaluar ideas o afirmaciones sobre todos los temas, desde la comprensión de la historia y el lenguaje hasta la toma de decisiones en nuestra vida personal. Se puede decir que su objetivo principal es llegar a juicios bien fundados sobre lo que es cierto y lo que es esencial acerca de cualquier tema.
Suele secuenciarse mediante el uso de “herramientas”las cuales son estructuras diseñadas para mejorar las habilidades de pensamiento crítico que pueden aplicarse a cualquier tema o situación.
¿Cuáles son las etapas del pensamiento crítico?
Es un proceso que consta de cuatro etapas: precrítica, consciente, crítica y postcrítica.
La etapa precrítica se produce cuando se está expuesto por primera vez a la información, pero no se hace ningún esfuerzo por analizarla o evaluarla.
La segunda etapa llamada consciente ocurre cuando empiezas a pensar en la información de forma crítica, pero aún no tienes ni idea de cómo hacerlo.
La etapa crítica es aquella en la que identificas supuestos, reconoces prejuicios, sacas conclusiones y emites juicios basados en las pruebas presentadas.
En la etapa final -postcrítica- revisas tu conclusión y determinas si es válida basándote en tu análisis y evaluación”.
Los pensadores críticos
Los pensadores críticos son capaces de identificar suposiciones, buscar falacias en el razonamiento y hacer un uso adecuado de las pruebas. Ensayan diferentes perspectivas, imaginan alternativas para ver una situación y consideran múltiples causas de efectos.
Aunque las definiciones estándar de pensamiento crítico incluyen el examen de supuestos, la evaluación de pruebas y el juicio de afirmaciones, algunos autores han argumentado que, en general, no se dispone de instrucciones claras para aplicar dichas habilidades.
La práctica del pensamiento crítico, es un proceso que lleva a los individuos más allá de la memorización, la repetición y la imitación para explorar, cuestionar y evaluar. El examen reflexivo de ideas y conceptos se convierte en la capacidad de llegar a conclusiones fundamentadas basadas en el pensamiento independiente y no en lo que ha sido aceptado por otros.
Importancia del pensamiento crítico en el mundo digital.
El pensamiento crítico nunca ha sido tan importante, vivimos en un mundo digital en el que se puede acceder a la información casi instantáneamente y sin costo monetario alguno. Nuestra capacidad de decisión se ve constantemente puesta a prueba por tentaciones, anuncios, desinformación y falsas narrativas.
La capacidad de pensar críticamente es una habilidad crucial que nos permite cribar la enorme cantidad de información disponible hoy en día y tomar decisiones basadas en hechos y no en ficción.
El pensamiento crítico en los jóvenes.
Los jóvenes necesitan pensar de forma crítica ya que viven en un mundo cada vez más complejo y que cambia con rapidez. El pensamiento crítico permite a los jóvenes formular juicios y tomar decisiones con conocimiento de causa.
El espíritu crítico es un activo inestimable en la vida. Los jóvenes, en todas las etapas de su desarrollo, pueden adquirir valiosas habilidades y puntos de vista con un recurso que les desafía a cuestionar sus suposiciones y les anima a pensar más profundamente sobre las cuestiones que se les plantean.
Nos hemos convertido en una sociedad excesivamente dependiente de la electrónica y las redes sociales, en detrimento de nuestros propios pensamiento. Los investigadores han demostrado que, de hecho, el aumento en el uso de la tecnología puede disminuir la capacidad de pensar críticamente cuando se trata de situaciones del mundo real.
Animemos a nuestros hijos a hacer preguntas, pensar de forma crítica y desarrollar sus propias opiniones.