Por Óscar Fernández Galíndez – Venezuela / Correo: osfernandezve@gmail.com
En todas las ciencias, el científico se caracteriza principalmente por la búsqueda de patrones, secuencias, pautas, regularidades. A través de la identificación de dichos signos, dicho científico se atreve a hacer predicciones. Estas predicciones pueden o no ser correctas. Pero, ¿qué es lo que hace que esto ocurra de una forma u otra?.
El científico busca dichos patrones en la observación de la naturaleza y si hablamos de las ciencias humano/sociales, entonces hablamos de la naturaleza humana. ¿En dónde radican los posibles errores predictivos? Al respecto menciono posibles respuestas:
1.-Al asumir algo no natural como natural, por ejemplo que los seres humanos son contradictorios por naturaleza.
2.- Al creer que los patrones de la naturaleza, son inmutables. Ejemplo el cambio climático.
3.-Al atribuirle una explicación simple a algo complejo, por ejemplo la teoría de la evolución, no es sólo selección natural o competencia entre los organismos, también hay cooperación y está última se da más.
4.- Al creer que desde un enfoque paradigmático se puede explicar todo, por ejemplo creer que el mundo sólo se puede explicar desde una perspectiva hemisférico cerebral izquierda sin tomar en cuenta las visiones hemisférico cerebral derecha y la interhemisférico cerebral.
La neuroinmunología social, busca abrir el compás tomando en cuenta todo lo dicho arriba, permitiendo la posibilidad de observar la realidad desde una mirada integrativa a través de la cual, la misma lógica aristotélica sea puesta en cuestionamiento, para permitir así la incorporación de otras lógicas que sin negar la anterior, la enriquezcan y permitan una comprensión global de los fenómenos. La neuroinmunología social observa por ejemplo ciertos patrones que al parecer terminan siendo representativos de ciertas zonas del mundo, más que en otras y busca explicaciones de naturaleza transcompleja.
Por ejemplo:
¿Por qué en Estados Unidos se ven más las masacres en las escuelas que en cualquier otra parte del mundo?
¿Por qué en muchos países asiáticos los suicidios entre jóvenes es mayor que en otras partes del mundo?
Y por último, ¿Por qué en países como Venezuela, los niveles de resiliencia son tan altos, más que en los países anteriormente citados?
Sin embargo, aquí en Venezuela está emergiendo un patrón asociado a la aparición de niños violadores de otros niños. Observamos pues una tendencia hacia el crecimiento de la violencia en el mundo. Así como lo que en el pasado se conoció como histeria colectiva, estamos presenciando la diseminación en el mundo de una epidemia de violencia, que de acuerdo a las idiosincrasia de cada pueblo o nación, tendrá una forma diferente de propagación y manifestación.
Todo lo anterior forma parte de un mega proyecto que está en plena ejecución y del cual apenas comenzamos a obtener respuestas. Sin embargo, está demás decir que los resultados de dichas investigaciones serán muy útiles, a la hora de diseñar políticas y/o estratégias de estado y de defensa. Por ello proponemos la creación de laboratorio de neuroinmunologia social en el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), para así poder avanzar más en estas construcciones científico/teóricas.