Por: Rafael Mello – Brasil / Correo: rafaelmellocad@gmail.com / Cuenta Instagram: @theraposo
Seguro que en algún momento de tu vida te preguntaste: Pero al fin y al cabo, además de enseñar ¿qué hace un historiador? ¿Estás dando vueltas en busca de eventos? ¿Te sumerges en las bibliotecas en los libros más antiguos posibles? ¿Es quién no se cansa de pensar en el pasado? Y finalmente, la pregunta más común: ¿Pero quién puede escribir sobre historia?
Bueno, en este artículo pretendo presentarle a usted, lector, un poco sobre una rama de la historia que cada día ha ganado mucha atención y nuevos adeptos, me refiero a la historia pública. Surgida en Estados Unidos alrededor de la década de 1990, se presenta como una nueva forma de acción y concepción de lo que es la historia.
Origen
Pues entenderlo en sí mismo no es tarea difícil, como explica el historiador Bruno Leal en su blog:
la propuesta que surgió en California tuvo que ver principalmente con la crisis de empleabilidad que azotó a los recién graduados en ese momento, especialmente en el sector público. ¿Dónde más, aparte del salón de clases, podría trabajar un graduado en historia? La Historia Pública, en este sentido, podría ayudar a ampliar el abanico de posibilidades.
Pero antes de continuar directamente y abrir un breve hueco en nuestro texto, me gustaría sugerir que el lector más acostumbrado a la investigación busque textos de Marta Gouveia de Rovai, Jill Liddignton y Michael Frisch, aquí hay nombres dentro del continente americano que propone no sólo la investigación, sino también la producción de historia pública y merecen la atención de todo aquel que quiera profundizar en el tema.
Pero finalmente, comprender por qué y cómo surgió la historia pública nos lleva a la pregunta final que formulé en el primer párrafo de este texto:
¿Quién puede escribir sobre historia?
Bueno, hablando necesariamente de Brasil, hay una norma que regula el ejercicio de la profesión y que dice que a ella asisten los que tienen grado superior o superior en el área, pero en cambio, tampoco hay sanción para los que tratar de ejercer la profesión de la misma manera en el ejercicio libre (distinto de las actividades remuneradas de las empresas o de los cargos públicos) lo que en este caso también deja lagunas para ello.
Pero para agregar un elemento que puede aportar mucho a nuestra discusión, pensemos en el período de pandemia actual por el que ha pasado el mundo. Básicamente llegamos al 4to año de la pandemia del COVID 19 y sus primeros 2 años (2020 y 2021) en los que en diferentes partes del globo hubo confinamientos que cambiaron la rutina y forma de relacionarse de las personas. Una relación que aumentó mucho fue con las redes sociales y lo que en ellas se podía producir, esto detonó la producción de podcasts a gran escala y sobre los más variados temas, aquí nos centraremos en aquellos destinados a discutir la historia.
Cuando analizamos las nóminas (la persona que se indica como líder o responsable del programa) nos encontramos con los más variados perfiles que van desde médicos hasta abogados y todos ellos, de una forma u otra, debaten y construyen material histórico. Aquí es interesante pensar que la propia historia pública predice este tipo de acciones cuando habla de autoridad compartida, en este punto ya no se discute QUIÉN puede escribir, sino ¿cómo podemos escribir juntos? Y cuando pensamos en la producción de podcasts, entendemos la realidad de posibilidades muy emocionantes.
Bueno, tengo la intención de escribir algunos textos más hablando sobre este tema, así que terminaré aquí. Pero la historia pública es rica y muy diversa, abriendo posibilidades para un sinfín de discusiones sobre diversos contenidos y formas de hacerlo, y que seguramente durante el año estaré explorando mejor junto a ustedes lectores del blog de Petróglifos.
Referencia
National Council on Public History. What is public history? https://ncph.org/what-is-public-history/about-the-field/